Creepypasta
¿Quieren saber mi historia? Pues bien, se que lo que les contaré sonará muy loco e irracional, pero así es como sucedieron las cosas.
Mi esposa y yo nos casamos enamorados perdidamente, nuestros planes eran de viajar y conocer muchos lugares y, por supuesto más tarde tener hijos. Todo iba de maravilla, hasta aquella maldita noche.
Esa noche en que un auto mato a mi amada esposa.
Lo recuerdo como si hubiera sido ayer, salíamos de un bar con un poco de copas encima, pedimos un taxi y mientras esperábamos paso un auto a exceso de velocidad y haciendo zigzags, se pego demasiado a la acera y la golpeó. Yo estaba ahí con ella tomada de la mano pero a mi ni me toco, solo sentí cuando me la arranco de la mano y su cuerpo salió volando.
Corrí a ayudarla y me olvidé del maldito auto que huyó. Cuando la abrace, vi que su cabeza se había golpeado con el pavimento, ya sabia que había muerto, pero mi cerebro se negaba a creerlo.
En cuanto llegó el taxi, el conductor, alarmado, me preguntó si nos llevaba a aun hospital. Yo le dije que no y le di la dirección a donde iríamos, me miró confundido pero aceptó. Le ofrecí el triple de lo que costara la dejada si no comentaba esto con nadie y acepto.
Mi destino era una amiga en común que sabía algo de brujería, poderes sensoriales, alquimia, todo aquello que está fuera del alcance de las personas comunes.
Cuando llegue se asombro mucho de ver a mi esposa muerta. Le conté lo sucedido y también lo que quería. Se quedo mirándome pensativa.
Mi intención era que ella con su conocimiento volviera a mi esposa a la vida.
Después de un rato me dijo que eso era difícil y delicado, le ofrecí una buena cantidad de dinero, aceptó y me dio varias recomendaciones. Una de ellas es que solo saliera con ella de casa en las noches, tratar de que no hablara mucho con las personas y no hablarle a los demás de ella. Todo lo acepte, solo quería a mi amada de regreso.
Nuestra amiga me dio un liquido verde muy amargo y a mi esposa la cambió de ropa y le hizo unos ungüentos. Lo que tome me empezó a marear y no sé cuando me quede dormido.
Al día siguiente desperté al lado de mi esposa, estaba viva y sonriente. Nuestra amiga me miró satisfecha y dijo, si quieres que todo siga igual debes tomar este brebaje cada 8 días, no puedes fallar o ella morirá de nuevo. Me sorprendí mucho, se suponía que era ella la muerta y debía conservar su salud, ella ere la que debería beber el brebaje, aunque mi amiga no me dio una explicación lógica acepte, lo importante es que tenia a mi esposa conmigo.
Se podría decir que llevábamos una vida normal, yo trabajaba en el día y en la noche salíamos a comer o a bailar. Las personas nos miraban extraño, como si estuviéramos locos.
Teníamos los planes de viajar, conocer el mundo, pero con la recomendación de no salir de día esos planes tuvieron que olvidarse, aunque eso no importaba, igual seguíamos enamorados.
Un día un amigo de la empresa me llamó a una oficina vacía para charlar en privado. Me miró un poco extraño y me dijo que tenía que olvidar a mi esposa, no podía seguir creyendo que estaba viva y que me acompañaba a las reuniones de la empresa. Me enoje con él, como era posible que hablara de esa forma de mi amada, hasta intenté agredirlo.
Cuando llegué a casa y le conté a mi esposa lo sucedido, me sugirió no salir mas, solo al trabajo y ella se encargaría de todo en la casa, seguí mi vida, cuando preguntaban por mi esposa, siempre decía en casa.
En una ocasión olvidé ir a recoger el brebaje de mi amiga y para colmo de males no encontraba a mi esposa, sin saber que hacer cogí el auto y fui donde nuestra amiga, le conté lo sucedido y sonrió, con una sonrisa triste, como si algo la atormentara. Me confesó que mi esposa solo estaba en mi mente, el brebaje que ella preparaba era para que la siguiera viendo. No lo podía creer, no era posible llore, la maldije, la insulte.
Me propuso hacer una prueba, me dio una gota del brebaje y ahí mismo apareció mi esposa, 5 minutos después desapareció, sentí enloquecer, ella me pidió dejar todo así, que dejáramos así descansar a mi esposa, acepte con un dolor en el alma.
Cuando llegue a casa mi esposa estaba en la sala, sonriente me preguntó dónde, estaba le conté lo sucedido. Me aconsejo nunca más hablar de ella, siempre estaría en casa para mi.
Así pasaron 4 años salía trabajaba y volvía a casa con mi esposa. La amiga que me había dado la pócima un día llego a visitarnos pero no le abrimos la puerta, nos reímos como niños por nuestra travesura.
En la empresa llegó una joven muy linda, la triplicaba en edad pero la joven me miraba de una manera sensual, hasta que un día me invitó a salir. No se el por que acepté. Mi esposa siempre estaba en casa y todos mis compañeros me hacían viudo, salí una o dos ocasiones con ella hasta que la encontraron muerta en un alcantarillado, alguien la había ahorcado, la noche anterior había salido con ella fue nuestra primera relación sexual, algo maravilloso explosivo.
Cuando mi esposa despertó yo ya sabia la noticia de mi amante, estaba triste pero no podía demostrar dolor, me sonrió y me dijo ahí esta tu zorra, sabes que siempre serás solo mío, cuando le iba a pedir disculpas unos golpes en la puerta lo impidieron, era la policía. Le dije a ella que huyera, me miró sonriente y dijo a mi no pueden verme, te buscan a ti.
Efectivamente, la policía me acusaba del asesinato de mi compañera, según todas las pruebas era culpable, hasta hay dos testigos que me vieron ir con ella al lugar del asesinato.
Ahora estoy aquí, pagando 46 años de cárcel, lo único que me alienta es que mi esposa me visita todas las noches, no hablo con nadie aquí, por eso todos me llaman EL LOCO.
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Nos leemos en la siguiente y recuerden… no tengan miedo de eso que no pueden ver… pero está ahí… detrás de ustedes.